
Tras los atentados terroristas perpetrados en París el 13 de noviembre 2015 y que dejaron un centenar de muertos bajo el pretexto de Yihad en nombre de Dios, el Consejo Superior de Ulemas de Marruecos ha promulgado una Fatua (decreto religioso) para clarificar lo que es realmente la Yihad en el Islam.
En su Fatua, el Consejo se basa en los versículos coránicos: «no cometáis agresión pues, ciertamente, Dios no ama a los agresores» y «quien matará a un ser humano, no siendo [como castigo] por asesinato o por sembrar la corrupción en la tierra, sería como si hubiera matado a toda la humanidad».
Así, el consejo precisa que los tipos de la Yihad legítima son:
– Yihad annafs (yihad de cada uno contra sí mismo) a través de la educación, la purificación del alma y su preparación para asumir la responsabilidad.
– Yihad por el pensamiento mediante el uso del espíritu para servir los intereses de la humanidad.
– Yihad por escritura a través de la publicación de obras y artículos útiles, que refutan las falsas acusaciones divulgadas sobre el Islam y los musulmanes.
– Yihad con bienes económicos consiste en gastar con generosidad y contribuir al desarrollo socio-económico.
El Consejo Superior de Ulemas precisa que los musulmanes recurren al uso de las armas sólo si son atacados por sus enemigos y cuando todas las vías pacíficas están agotadas, siendo el Gran Imán quien debe declarar este tipo de Yihad.