“Nos encontramos en el aeropuerto internacional de Casablanca, en Marruecos. Cada día, entre 150 y 200 vuelos procedentes o con destino a Europa utilizan estas pistas”, explica el periodista de Euronews, Julián López Gómez.
Casablanca es el principal aeropuerto de los 19 que hay en Marruecos. El año pasado, 8 millones de pasajeros pasaron por aquí. Muchos con destino o procedentes de Europa.
Marruecos fue el cuarto destino en número de vuelos procedentes de aeropuertos europeos, tras los Estados Unidos, Rusia y Emiratos Árabes Unidos.
También se ha convertido en el primer país no europeo en integrar la estructura de intercambio de información de EUROCONTROL, la «Organización Europea para la Seguridad de la Navegación Aérea».
“El tráfico aéreo entre Europa y Marruecos es muy importante. Nuestro espacio aéreo es utilizado por los vuelos procedentes de Europa con destino a las Islas Canarias, América Latina y el África subsahariana. Marruecos actúa de puente entre Europa y el continente africano, por eso, garantizamos la seguridad del espacio aéreo entre Marruecos y el mundo con los mismos estándares, seguridad y fluidez que en Europa”, explica Zouhair Mohamed el Aoufir, director ejecutivo de la Autoridad Aeroportuaria de Marruecos.
En 2016, el volumen del tráfico aéreo entre Europa y el resto de regiones del mundo rondó los 1,8 millones de vuelos.